Preside nuestra cabeza, anima nuestro corazón y se manifiesta a través de nuestras manos."
Preside nuestra cabeza, anima nuestro corazón y se manifiesta a través de nuestras manos."
Las empresas tienen alma. El alma es lo que les da sentido, lo que define su identidad, lo que anima su nacimiento y orienta su crecimiento. Lo que les inspira.
El alma de The Marketing Factory se configura a partir de tres grandes principios.
Uno. Creemos en el pensamiento lateral como herramienta de construcción creativa que permite alumbrar grandes conceptos no sólo eficaces sino, sobre todo, innovadores.
Dos. Creemos que nuestra misión es aportar valor a nuestros clientes y para ello hemos desarrollado una metodología propia para la construcción de marcas líquidas -dotadas de contenido, sostenibles y atractivas-y plataformas estratégicas de expresión de marca desde las que poder generar relaciones perdurables con el consumidor a través de experiencias de marca.
Y tres. Creemos que lo más importante de una empresa son las personas. Y pensamos que para atraer y retener talento, sólo hay una fórmula: motivación + implicación + desafío. Cuando las personas se sienten valoradas desarrollan todo su potencial. El resultado es la excelencia.
Inspirado por estos tres principios, Carlos Pérez-Íñigo funda en 1999 The Marketing Factory con el objetivo de fusionar la visión desde ambos lados de la mesa, haciendo confluir su experiencia en marketing en el área de anunciante en compañías como Johnson's Wax -donde entró por primera vez en contacto con el concepto y las técnicas de pensamiento lateral-, L'Oréal o Flex, vinculado siempre a la innovación, el desarrollo y lanzamiento de nuevos productos y marcas, con la de sus responsabilidades en agencias de publicidad como Target Audience y Ruiz Nicoli Líneas, donde trabajó como CEO, Head of Strategy o Creative Planner para grandes cuentas nacionales e internacionales, mientras ejercía simultáneamente como consultor para importantes instituciones públicas y privadas.
Las empresas tienen alma. El alma es lo que les da sentido, lo que define su identidad, lo que anima su nacimiento y orienta su crecimiento. Lo que les inspira.
El alma de The Marketing Factory se configura a partir de tres grandes principios.
Uno. Creemos en el pensamiento lateral como herramienta de construcción creativa que permite alumbrar grandes conceptos no sólo eficaces sino, sobre todo, innovadores.
Dos. Creemos que nuestra misión es aportar valor a nuestros clientes y para ello hemos desarrollado una metodología propia para la construcción de marcas líquidas -dotadas de contenido, sostenibles y
atractivas-y plataformas estratégicas de expresión de marca desde las que poder generar relaciones perdurables con el consumidor a través de experiencias de marca.
Y tres. Creemos que lo más importante de una empresa son las personas. Y pensamos que para atraer y retener talento, sólo hay una fórmula: motivación + implicación + desafío. Cuando las personas se sienten valoradas desarrollan todo su potencial. El resultado es la excelencia.
Inspirado por estos tres principios, Carlos Pérez-Íñigo funda en 1999 The Marketing Factory con el objetivo de fusionar la visión desde ambos lados de la mesa, haciendo confluir su experiencia en marketing en el área de anunciante en compañías como Johnson's
Wax -donde entró por primera vez en contacto con el concepto y las técnicas de pensamiento lateral-, L'Oréal o Flex, vinculado siempre a la innovación, el desarrollo y lanzamiento de nuevos productos y marcas, con la de sus responsabilidades en agencias de publicidad como Target Audience y Ruiz Nicoli Líneas, donde trabajó como CEO, Head of Strategy o Creative Planner para grandes cuentas nacionales e internacionales, mientras ejercía simultáneamente como consultor para importantes instituciones públicas y privadas.